Los planes que nunca salen

Ayer lunes me escapé de mi casa. Actué como un total niño de 15 años desafiando los 'ni te atrevas' de sus padres. Pero algo me llamaba, como una polilla a la luz. Salí de Mayagüez a eso de las 8am, y llegué a mi destino a eso de las 10… Lo se, y ese no es el punto, de todos modos… El plan era… ninguno, no había ningún plan, en lo absoluto. Yo solo queria verla, ese era mi llamado, y eso fue lo que atendí. Un beso y un abrazo más tarde, estábamos de camino al desayuno. Entre conversaciones, recuerdos, y anécdotas de nuestras familias, me voy dando cuenta cada vez más que las diferencias entre nosotros, entre familias, entre países, entre culturas, son muy muy marcadas… Pero esas mismas diferencias, esas mismas marcas son las que le añaden una chispa preciosa a nuestra relación. Una relación cuyo único nombre ahora mismo es inoportuna. De fondo sonaba una canción, muy conocida, a lo que ella dice 'las cosas… la canción que pide un beso, y lo pide con el apodo que me tienes'. […] Pasamos un día hermoso, sin tiempo a planificar nada pues siempre se interponían llamadas. Terminamos en su casa… envolviendo un regalo para una compañera de trabajo de su madre, y confieso que ha sido uno de los mejores momentos que he vivido a su lado. Entre risas, bromas, besos, cinta adhesiva mal pegada y papel de regalo mal cortado, viví con ella una conexión que no tiene palabras para explicar. Vivimos el posible futuro de lo que seriamos en unos 5 años. La conocí, no supe cual era su color favorito, ni su comida preferida, pero nos conocimos con unos niveles de profundidad que no se dan conversando. […] Luego luego, me encuentro con su padre, y admito que disfruté el 'tirón de poder' que había entre el y yo, ambos luchando y haciendo lo imposible por conquistar un segundo de su atención, una sonrisa, un te quiero… Quien ganó? Pregúntenle a ella. […] Al final de la noche, luego de una separación forzosa y una cena y tragos con unos buenos amigos, la llamo. Intentando internalizar todo lo que había sucedido le agradezco su compañía, y le confieso que ha sido uno de los mejores 'dates' que he tenido con ella… Su respuesta 'no tienes nada que agradecer, fue un verdadero placer, poder compartir de una vez con los 2 hombres de mi vida'… Lo vieron? Soy uno de los hombres de su vida! =)